Título: El cuento de la princesa Kaguya
Duración: 137 minutos
País: Japón
Estudio: Ghibli
Director: Isao Takahata
En este tiempo de coronavirus las
vacaciones se convirtieron en estancia obligatoria en casa así que aprovechando
que Netflix ha puesto en su catálogo las películas del estudio Ghibli decidimos
darle la oportunidad a esta película con un dibujo tan fuera de lo común.
La historia
inicia cuando un anciano que se dedica a cortar bambu se encuentra con una
pequeña niña que parece nacer de una flor. Aunque inicialmente la niña es
diminuta —casi al estilo de historias como Pulgarcita— cuando el anciano le muestra la niña
a su esposa ésta se convierte en un bebe. Enseguida la pareja de ancianos llega
a una resolución, los cielos les han enviado a esa niña para que la críen y
cuiden, se trata de una bella princesa.
Nuestra
bella princesa parece ser un bebe normal, juega, gatea y ríe como el resto de
los bebes; aunque cuando está cerca pareciera que la naturaleza responde a su
estado de ánimo. Viviendo entre las montañas con sus padres la princesa es
feliz y cuando se hace de una pandilla de amigos no puede más de felicidad;
nuestra pequeña protagonista no necesita nada más en el mundo que corretear
descalza en medio de las montañas en compañía de sus queridos amigos.
Pero el
anciano que ahora es su padre adoptivo recibe regalos de parte de los cielos
que le dan a entender que esa no es la vida que desean para la princesa, no, lo
que los cielos quieren es que se vuelva una dama refinada, elegante y adinerada
y el anciano está dispuesto a todo para darle la vida que ella merece.
Hasta aquí
la trama. Debo decir que esta película llama la atención inicialmente por la
animación, el estilo de dibujo en colores pastel con trazos poco definidos es
peculiar, por ponerlo de algún modo, sin embargo a juego con la música llegaba
a unos momentos de belleza y profundidad encantadoras. Así por ejemplo cuando
la princesa se encontraba enojada todo aquel remolino de colores le daba al
espectador la idea de un ser sobrenatural. En realidad nunca había visto que
jugaran así con la animación y me pareció muy bello.
Lo segundo
que tengo que decir de ésta película es, ¡madre mía!, pero que triste. Durante
todo el filme la opresión hacia la princesa es tal que nunca llega a ser dueña
de su destino y si bien se rebela como mejor puede a sus circunstancias la
fatalidad la atrae una y otra vez al camino marcado por alguien superior a
ella.
¿Qué
encontramos durante este cuento animado?
La
incomprensión de los padres que buscan lo que ellos creen mejor para sus hijos
sin conocerlos a fondo, sin darse el tiempo de conversar con ellos sus
verdaderos sueños y aspiraciones. Así mismo encontramos una relación de pareja
disfuncional, pues aunque la madre adoptiva de la princesa la comprendía y
entendía lo que la hacía feliz se doblegaba ante la voluntad de su esposo.
Y la
naturaleza, por supuesto, las montañas hacen feliz a la princesa, pero se ve
alejada de ellas y obligada a permanecer en un mundo de reglas y etiqueta que
no la hacen feliz. Volver a las montañas para ella es regresar a su hogar y a
lo que tanto ha amado; quizás por eso aquel amor atormentado de su infancia le
causa tanta añoranza y lo lleva consigo hasta la edad adulta, no tanto por el
hombre que dejo, si no porque para ella aquel amor infantil representó la
verdadera felicidad.
Yo
le otorgo 9/10, es una película con muchos matices, que avanza despacio y
muestra muchas debilidades humanas envueltas en un cuento de hace muchos años.
¡Pero madre mía!, vaya final deprimente. Da la sensación de que nunca eres ni
serás dueño de tus propias decisiones, que por más que pelees tu camino esta
trazado. Y aquel torrencial de lágrimas envuelto en música y flores pues no sé,
me quedo con la imagen de los dos padres que miran llorando a su princesa.
¿La
recomiendo?, sí, ¿es triste?, más que triste yo diría que melancólica y un
tanto deprimente, ¿y la luna?, bien gracias.
Estudio Ghibli
La verdad es que este estudio tiene películas maravillosas. Me alegra que te haya gustado.
ResponderEliminarUn beso.
Este estudio hace unas producciones fabulosas. Me alegra que te haya gustado.
ResponderEliminarBesos
Es hermosa esta historia, y el dibujo ni hablar <3
ResponderEliminarUn beso Janeth desde Plegarias en la Noche.
Hello! great entry, very interesting. I read it very nice. I had to translate it because my language is Polish :) I feel joy, optimism and good energy on your blog! and these beautiful pictures :) Fantastic blog! Very inspiring :)
ResponderEliminarStay Safe!
¡Hola, Janet!
ResponderEliminarVeo que se trata de una película maravillosa, me encanta que la hayas disfrutado ;)
No la he visto, me la apunto para verla en otro momento, en estos días no me provoca nada que me deprima.
¡Gracias por reseñarla!
Me ha encantado tu blog y me quedo de seguidora (Marianna 2.0)
Te invito a que te pases por el mío si te apetece (Los Libros de Mava, el que aparece en mi perfil).
Un gran abrazo.
Una lectura que pinta interesante aunque en realidad no me veo leyéndolo ahora mismo.
ResponderEliminar¡Hola! ^^
ResponderEliminarEsta película me encantó. Tiene un estilo de lo más original, con un dibujo tradicional japonés precioso. La ambientación, la historia, los paisajes, la música, los personajes... todos y cada uno de sus elementos consiguen hacer de esta película una auténtica obra de arte.
Besos!
Bueno, ya sabes que la película me encanta xD, alegra que a ti también te haya gustado.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Esta película me ha gustado muchísimo, es tan simple y pura! Lo único que no me ha gustado es cuando el chico se ve dispuesto a abandonar a su hijo y a su mujer e ir con ella así sin más, eso quebró su imagen de nobleza ante mis ojos. Pero la película en si es preciosa. Además que la protagonista me recordó en algún sentido a Hinata, con eso de princesa oprimida que debe cumplir las reglas y todo lo de la luna.
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