Bien,
no es precisamente mi estilo dejar libros a la mitad, pero es que simplemente
cuando no se puede no se puede y dado que hay tan poca vida desperdiciarla
leyendo algo a la fuerza pues…
1. En primerísimo
lugar tenemos a la Divina Comedia, ¡adore el infierno!, cada llama, cada pena,
cada lágrima, la narración y el horror, ¡sublime!, el purgatorio fue un poco
tedioso, pero tenía lo suyo, tenía su encanto, ¿pero el Cielo?, caí dormida en
cada oportunidad, vaya señor aburrimiento. Pero ya que es un clásico habrá que
intentarlo de nuevo, ¡espero ahora sí poder vencerlo!
2. En segundo
lugar tenemos a “Lolita”, este libro que nos habla de la atracción que causan
las niñas en ciertos hombres prometía perversión y faltas a la moral, pero al
final sólo me asqueo el protagonista.
3. La Biblia
ocupa el merecido tercer lugar y es que ciertamente estoy segura de que he
leído unas tres cuartas partes (incluso me avente las veinte hojas que hablan
de las tres varas de oro que debe tener el arca en tal lado y el punto exacto
en el que debe haber un rubí y sí fulano hijo de mengano que vino de
perengano…) un libro apasionante, pero a veces me dormí y la sabiduría me pasó
de noche.
4. Don Quijote
de la Mancha. Me refiero al monstruo original, mira que pelee tres días
valientemente con él, pero luego deje la casa de mi primo (donde estaba la
indomable bestia) y tanto él como yo descansamos de nuestra guerra, tenemos un
duelo pendiente.
5. Rayuela. Lo
mismo, fue un libro prestado por escaso tiempo (mientras vacacionaba en casa de
un primo) y él y su enredada y extraña trama (admitamos que esa cosa no tiene
pies ni cabeza y eso lo hace tan único) quedo varado en la incomprensión de los libros inacabados.
6. Lestat el
vampiro. Quería continuar con las crónicas vampíricas de Anne Rice, pero
sinceramente su vampiro desviado sexualmente, enamorado de su madre y vanidoso
como nena me mando de un solo golpe a besar la lona.
7. Vampire
Academy. De por sí los vampiros no me inspiran y sí encima me ponen vampiros
adolescentes en una academia me es suficiente para tirarlo al basurero. Intenté
leerlo por el furor que estaba causando, pero no pude pasar del tercer o cuarto
capítulo.
8. Una serie de
eventos desafortunados. Mi hermanita tenía los libros e intente leer el primero,
pero desde el primer párrafo lo deteste y acabe tirándolo por ahí sin
posibilidad de reconciliación.
9. Por quién
doblan las campanas. Será que no le estaba poniendo empeño, me leí la mitad y
sólo recuerdo que estaban en guerra, que había que destruir un puente y un
romance lejano. Igual y luego lo leo en serio.
10. El Mago. Los
secretos del inmortal Nicolas Flamel. Esta es una de las compras más
desafortunadas que han hecho en mi casa, no sólo es el segundo libro así que la
trama parte de algo que se supone deberías saber, sino que además es
ridículamente infantil queriendo pasar por juvenil, algo como Barney vistiendo
smocking, te deja K.O.
Y
bien estos fueron los diez innombrables libros que me han vencido (o que he
botado por imposibles), ¿Qué libros han dejado ustedes a la mitad?