La luz que no puedes ver

Título: La luz que no puedes ver

Autor: Anthony Doerr

Editorial: SUMA

Páginas: 658

Premio Pulitzer de literatura 2015

Antes que nada muchas gracias a la editorial por el envío, SUMA rara vez me decepciona con sus libros y en esta ocasión me ha entregado una maravilla literaria, lo agradezco de todo corazón, y bien, ya liberados los sentimientos, vamos a la trama.

Marie-Laure es una niña ciega que vive en París, no tiene madre pero no le hace falta porque su padre es maravilloso, cada cumpleaños le construye cajas con regalos sorpresa que ella debe buscar con su desarrollado tacto, también le ha construido una maqueta para que conozca las calles y así pueda caminar libremente a pesar de su ceguera.

Werner es un niño alemán con el cabello tan claro que parece blanco, es un huérfano, pero tanto él como su hermana, Jutta, viven en un orfanato donde son queridos, no hay mucho dinero pero eso no es problema para Werner quien tiene una mente despierta y que, gracias a su genialidad, logra reparar una radio que encuentra descompuesta. La radio le abre la mente a otros mundos, podría estudiar, ser un ingeniero, conocer de ciencia, física y matemáticas, él podría ser lo que quisiera.

Y van a ver las ganas de leer a Julio Verne
después de esta novela

Quizás Marie-Laure hubiera vivido hasta ser mayor al lado de su amable e ingenioso padre, quizás Werner se hubiera convertido en un asombroso científico, pero justo en aquel instante se desata la segunda guerra mundial, Alemania exige jóvenes para las filas, Werner termina usando su habilidad con las radios para capturar al enemigo, Marie-Laure se ve forzada a dejar Paris a enfrentarse a una realidad donde ya nada les pertenece; los niños que ahora son jóvenes se han convertido en enemigos, ¿pero les alcanzara la vida para saberlo?

¿Qué les puedo decir?, me tuve que aguantar las lágrimas incontables veces con este libro y al final me ha quedado un dolorcito puntiagudo en el pecho, como si el mundo se hubiera vuelto un poco más gris de lo que era ayer. Ver así la guerra, como la maquina cruel que arrastra a su paso a jóvenes inocentes es un llamado para que eventos como éste no vuelvan a ocurrir en este mundo.

Yo le otorgo 9.4/10, no es un libro con un final feliz lo cual es entendible, pero tiene cierta ternura a lo largo de sus páginas, quizás porque los protagonistas fueron niños que vimos crecer y que por lo mismo nos dejaron un hueco en el alma en las últimas páginas del escrito.

Si bien la novela es casi perfecta, pudimos saber de una joya muy codiciada que le causa problemas a Marie-Laure, pero al final resulta que no tuvo mucha relevancia por lo que no encontré la razón de ser de la misma (pudieron haber cambiado la joya por la radio y hubiese sido casi la misma cosa), he intentado encontrarle un valor sentimental o heroico en el hecho de la piedra cambiada por la llave, pero al final vuelvo a pensar que la joya resultó, finalmente, irrelevante, ya me dirán ustedes cuando lean la novela, porque este es uno de esos libros que les recomiendo con todas las letras.