Orgullo y Prejuicio

Título: Orgullo y Prejuicio

Autora: Jane Austen

Editorial: DEBOLSILLO

                Las obras de Jane Austen son mundialmente conocidas como una oda al feminismo y al romanticismo en su más pura expresión, personalmente cuando leí este libro por primera vez siendo una adolescente solo pude captar la elegancia de los diálogos y la agudeza de los personajes, el romance me encantó y decidí, sin mayores aspavientos que me gustaba.

He vuelto a leer este clásico de la literatura gracias a una lectura conjunta organizada por Un viaje en papel y Sumergida entre letras, así que una vez que volvimos a caer en las mieles de Austen no nos entretengamos más y vamos a la historia.

Elizabeth es una joven chispeante y encantadora que vive en el poblado de Hertfordshire, tiene cuatro hermanas, un padre —que aunque es un caballero resulta algo excéntrico en sus modos— y una madre bastante entrometida cuyo mayor anhelo es  casar a sus hijas con un buen partido.

Un día cualquiera el poblado se sacude con la noticia de que un joven soltero acaba de llegar a Hertfordshire, no solo eso, el joven es heredero de una gran fortuna, tiene buen porte y a ojos claras está buscando que una señorita bien educada lo lleve directo al altar.

Pronto las señoritas descubrirán que el tan codiciado soltero, el Sr. Bingley, es un derroche de paciencia y modales, su amigo en cambio, el Sr. Darcy, a pesar de su muy superior fortuna y su porte galante es completamente insoportable, un tipo pedante y engreído que desprecia a Elizabeth en un baile por no considerarla suficientemente bonita.

Pero la vida da unas vueltas muy extrañas y mientras Elizabeth siente cada vez más antipatía por el muy orgulloso Sr. Darcy él termina observándola con curiosidad y conforme pasa el tiempo también con un poco de aprehensión, pues la diferencia de clases entre ellos es muy grande para sucumbir a la pasión que lentamente la joven despierta en él.

Pues bien, ¿qué puedo decir del libro?, si bien lo disfrute más en mi primera lectura eso no deja de lado que sea un libro cautivante, con una protagonista simplemente maravillosa, una chica que se da su lugar, que usa la cabeza y no se deja llevar por los sentimientos, una mente que resulta de una ironía completamente irresistible, tanto para el lector como para el Sr. Darcy.

Leer Orgullo y Prejuicio no es solo leer una historia de amor, es adentrarnos en una época, unas costumbres y unas leyes que quizás en nuestro tiempo resulten incomprensibles, pero que ciertamente nos causan curiosidad y despiertan nuestro interés por la historia.

Yo le otorgo 8.5/10, si bien es una historia que me agrado bastante debo admitir que dependiendo del lector puede que el romance quede a deber, los personajes son tan propios, tan respetuosos de las leyes, tan damas y caballeros que se ciñen a las reglas de etiqueta religiosamente, es decir, el amor existe en sus corazones, pero no es como si vayan por ahí comentándolo.

El ritmo del libro siempre es lento y aunque existen sus pequeños climax y dramas no es como si el corazón diera un salto o se derramaran lágrimas, yo lo considero un libro bonito para pasar un rato tranquilo con un amor chispeante perdido en el siglo XIX.

Como dato curioso en ciertas versiones Elizabeth lleva por nombre Isabel, y su padre la llama cariñosamente “Bebel”, esto en sustitución del “Lizzy”, ya saben, cambios extraños de acuerdo a lenguaje que no tenían razón de ser.