Título: Más allá
del bien y del mal
Autor: Friedrich
Nietzsche
“No conocemos ni podemos
conocer lo mejor que hay en nosotros”.
“Más allá del bien y el mal” es uno de esos libros que
siempre oímos como referencia y que tenemos en la mente como el eterno
pendiente así que decidí dejar de escaquearme y ponerme con él.
El libro está dividido en nueve partes y cada una de esas
partes debate y filosofa acerca de algún tema. Debo admitir que leer este libro
fue difícil por el enorme número de referencias que se hace a otros filósofos y
pensadores. F. Nietzche se pasa criticando a todo mundo y en ocasiones tenía
que hacer uso del bendito buscador de internet para saber de quién estaba
hablando. Filósofos, músicos, pensadores, escritores, gente común, gente
aristocrática, ninguno se salvaba de la arrogante y sarcástica pluma de este
escritor, pero vamos por orden.
Los prejuicios de los
filósofos Como cabría esperarse aquí se da una crítica a la filosofía y a
los filósofos en su conjunto, especialmente Nietzche no para de criticar a
Schopenhauer, como si tuvieran alguna clase de rivalidad acérrima.
El espíritu libre ¿pero
qué cosa es el espíritu libre?, ¿Qué necesita un hombre para ser libre?, ¿qué
es un hombre vulgar?, Nietzche da sus opiniones acerca de todo. La verdad este capítulo
resulta bastante arrogante, pero supongo yo que los filósofos son arrogantes,
pese a que él en algunas ocasiones dice que no y luego que sí y es que este
libro es pura contradicción.
La esencia religiosa Aquí
Nietzche se enfoca en la biblia, enaltece al antiguo testamento mientras
encuentra que el nuevo testamento es demasiado blando. Menciona que la religión
es una manera para que las pobres ovejas (el vulgo) puedan vivir sus miserables
vidas, pero al mismo tiempo reconoce a Dios. Podría ser que estas ideas sigan
vigentes hasta nuestra época, creo que en términos de religión y divinidad
nunca nadie tendrá la verdadera respuesta.
Máximas e interludios
Esta es mi parte favorita del libro, se trata de una serie de frases,
algunas de ellas altamente conocidas como el épico:
“El que lucha con
monstruos ha de tener cuidado de no convertirse también en monstruo. Cuando
estas mucho tiempo mirando hacia un abismo, éste termina mirando también en tu
interior”.
Por desgracia también es en esta parte donde Nietzche nos da
sus ideas acerca de las mujeres, una idea machista, retrograda y ofensiva. Su
máxima al respecto va así:
“Cuando una mujer
siente la necesidad de adquirir conocimiento, generalmente hay algo en su
sexualidad que no funciona. La esterilidad hace que el gusto se virilice.” Sí,
ustedes podrán decir que de acuerdo a la época aquella era la idea generalizada,
pero alguien que pudo filosofar sobre Dios, el espíritu, el alma, la vida y
todos sus secretos nos despreció como cualquier hombre de la época, pues mira,
creo que tan profundo y certero no era.
Para la historia
natural de la moral ¿Qué es la moral?, ¿Quién decide que es la moral?, ¿qué
es lo que piensan los rebaños humanos?, Nietzche se pone en papel de juez para
criticar todo lo habido y por haber. Y es que este autor no se cortaba un pelo
en esto de criticar.
Nosotros los eruditos
A lo mejor como no soy una erudita este capítulo me pareció el más aburrido
de todos, ya el propio título destila una arrogancia tremenda y así se pasan
las hojas, se los dejó a los eruditos modernos, ¡salud para ustedes!
Nuestras virtudes En
este capítulo Nietzche se ensaña particularmente con las mujeres, afirma que
nuestro papel es ser bellas, tener hijos fuertes, servir de inspiración con
nuestros artificios y engaños, pero estudiar, cultivarnos, ¡Dios!, eso solo los
hombres locos y débiles podrían apoyarlo. La cosa llega al colmo cuando afirma
que una muestra de la estupidez femenina es que ni para cocinar servimos pues
él relaciona las artes de la cocina con la ciencia y si después de tantos años
cocinando la mujer no ha descubierto la ciencia oculta en los sartenes no se
puede esperar nada del género.
Ahora, por supuesto que me he enojado con este capítulo,
este hombre fue uno de los tantos obstáculos que las mujeres del pasado
tuvieron que derribar para lograr su libertad, un ejemplo escrito de que hubo
gente que de verdad pensó que no éramos capaces de nada y que incluso se
burlaba de los hombres que intentaron ayudar a la mujer en su búsqueda de la
igualdad de géneros.
Pueblos y patrias En
este capítulo resulta curioso que a pesar de lo enaltecido que Nietzche tiene a
los alemanes se pronuncie a favor de los judíos. Recordemos que en aquellos
tiempos se iniciaba el movimiento de guerras mundiales y había un creciente
sentimiento antisemita. Así que a pesar de que me enoje terrible con él por
pensar que las mujeres solo debían ser bonitas y ya hicimos las paces en éste
capítulo por ponerse del lado de los judíos.
¿Qué es lo
aristocrático? Probablemente este sea el capítulo menos relevante del
libro, aquí Nietzche afirma que la aristocracia puede elevarse por encima del
vulgo, que es esa, en realidad, su razón de ser. Enaltece a esos hombres casi
como si fueran de otra especie y afirma cuáles son sus deberes sagrados para
con la humanidad. Supongo yo que se sentiría muy ofendido si supiera que hoy en
día la aristocracia que aún queda en el mundo es usada como alguna especie de
celebridad que, mayoritariamente, sirve para posar en las revistas de moda y
aparecer en los diarios de chismes.
Yo le otorgo 8/10, si bien es un libro que te hace
pensar y que tiene partes muy buenas no puedo perdonarle sus ideas contra el
género femenino. También debo admitir que su aire arrogante no hacía demasiado
fácil la lectura, como autor pocas veces empatizas con él, da más la idea de un
maestro con poca paciencia que afirma tener la verdad absoluta de su parte.
Por otro lado sí que me da curiosidad seguir con su obra y
la filosofía en general, a lo mejor es que algo falla en mi sexualidad.
Gracias por la reseña, Janet.
ResponderEliminarBesos
Soy amante de las frases y entre las de -Friedrich Nietzsche me gusta esta:«S𝓲𝓷 𝓂úsica la vida 𝓢ería un error». 🎸. Me gusto leerte. Gracias por tu visita.
ResponderEliminarEste autor me da muchísima curiosidad pero ahora no sé... Creo que por ahora pasaré de él, a menos en esta obra, porque sigue dandome mucha curiosidad sus obras.
ResponderEliminarSaludos!
Excelente reseña y pues, tremendo autor.
ResponderEliminar¡Un abrazo!